Barreras metálicas: protección pasiva que salva vidas en rutas de alta velocidad

En las rutas de alta velocidad, donde los vehículos circulan a más de 100 km/h y los márgenes de reacción ante un imprevisto son mínimos, las barreras metálicas de seguridad se convierten en un elemento esencial para proteger vidas. Estas estructuras forman parte de lo que se conoce como protección pasiva: sistemas diseñados para reducir la gravedad de los accidentes cuando la prevención no ha sido suficiente. 

En Chile y en todo el mundo, su instalación está regulada por normativas viales que establecen criterios de resistencia, altura, ubicación y capacidad de absorción de impacto.

Dentro de este conjunto, las barreras doble onda y las barreras de contención cumplen un papel protagónico en proyectos viales de alta exigencia, desde autopistas interurbanas hasta rutas mineras y corredores logísticos. 

Último escudo ante un accidente 

A diferencia de la protección activa (señalética, iluminación, radares), que busca evitar que ocurra un siniestro, la protección pasiva actúa una vez que el accidente es inevitable. El objetivo es contener, redirigir o desacelerar un vehículo fuera de control, minimizando daños a los ocupantes y a terceros. 

Las barreras metálicas absorben parte de la energía del impacto y evitan que el vehículo invada zonas peligrosas como: 

• Pendientes pronunciadas 

• Obras de infraestructura (puentes, postes, muros) 

• Carriles contrarios 

• Zonas peatonales o ciclovías 

  
  

Las barreras doble onda son uno de los diseños más utilizados a nivel mundial debido a su alta capacidad de absorción de energía y redirección controlada del vehículo. Están compuestas por una lámina de acero con forma ondulada doble, fijada a postes de anclaje espaciados regularmente. Su uso es habitual en autopistas interurbanas, rutas de alta velocidad y accesos a zonas industriales donde la velocidad y el volumen de tránsito aumentan el riesgo de accidentes graves. 

Mientras tanto, las barreras de contención no solo están pensadas para separar flujos de tránsito, sino para proteger a los usuarios de peligros específicos: desniveles, pasos elevados, pilares de puentes o zonas de alta concentración de peatones. 

Su diseño y resistencia se eligen según la velocidad máxima de la vía y el tipo de tránsito predominante (vehículos livianos, buses, camiones pesados). 

En Valencia, contamos con una amplia experiencia en el diseño y fabricación de soluciones de seguridad vial que cumplen con los más altos estándares nacionales e internacionales. Nuestro equipo técnico asesora a empresas y organismos en la planificación de barreras metálicas, incluyendo modelos de doble onda y sistemas de contención adaptados a las condiciones específicas de cada proyecto.  

Gracias a procesos certificados y materiales de alta durabilidad, garantizamos estructuras confiables capaces de desempeñar su función crítica: proteger vidas en rutas y autopistas de alta velocidad. 

Integrar estos sistemas en el diseño de proyectos viales es una inversión en seguridad, responsabilidad social y protección de las personas que transitan por nuestras rutas.